ladiscusion.cl5 de junio, 2011
Los problemas se centran en la intercomuna Chillán-Chillán Viejo y en el secano costero que pierde fertilidad.
Chillán Viejo y Bulnes concentran planteles porcinos, cuyas emanaciones afectan calidad de vida de vecinos.
José Luis Montes V.
Uno de los “dolores del crecimiento” en Chile son los problemas medioambientales. Y aunque sería objeto de un análisis más largo relacionar si en la zona los dramas que se viven en este aspecto son efecto del progreso y desarrollo, Ñuble no está exento de problemas ambientales, partiendo por la calidad del aire en la intercomuna Chillán-Chillán Viejo, (ver página 4).
Al problema de la polución del aire, le siguen en importancia la erosión que se vive en la zona del secano interior; la concentración de vertederos en la zona de Chillán Viejo, y las altas poblaciones de cerdos que se dan en esta última comuna y también en Bulnes, con episodios de malos olores según los vientos reinantes, en los sectores vecinos.
“Triángulo de las Bermudas”
La comunidad que vive la presión más fuerte en el tema medioambiental es Chillán Viejo. Su alcalde, Felipe Aylwin, estima que las autoridades se están ensañando con esta comuna y que debiera compartirse la carga con otras localidades.
“Tenemos un relleno sanitario operando, dos vertederos abandonados percolando, (que son los de Enasa y Esparco), lodos, por así decirlo, que se obtienen de la planta de tratamiento de aguas servidas, que también está en Chillán Viejo, y que se vierten en los mismos 15 kilómetros cuadrados donde están los vertederos. Ahora nos quieren instalar una cárcel” se explaya el alcalde, quien al refutarle que la cárcel es un problema social y no medioambiental, nos asegura que un complejo para 1.200 reos, si crea un problema ambiental.
“Tenemos en la comuna dos chancheras que van a aumentar de 40 mil a 120 mil su producción, que afectan con su olor a vecinos de Rucapequén, Maule, Llollinco, Quilmo, Lajuelas y la zona urbana de Chillán. A esto se suma una planta de tratamiento de algas, que en menor escala también crea problemas de malos olores”.
Para colmo de males, Aylwin afirma que su comuna aparece hasta en el trazado del cableado de HidroAysén. Pero en su opinión lo más grave es el aire, ya que a pesar de tratarse de una situación esporádica los índices de partículas superan a las alarmas máximas santiaguinas.
Erosión
Para las comunas del secano interior de Ñuble, el mayor impacto se produce debido a la erosión, proceso en que se está perdiendo el suelo fértil por siglos de mal manejo agronómico. El presidente de la Asociación de Municipios del Valle Itata, el alcalde de Quillón, Jaime Catalán, señala que efectivamente es el principal efecto medioambiental en esa zona.
“El problema de la degradación de tierras es grave, basta recorrer la zona y observar las carcavas, que son producto de un mal manejo por décadas. Afortunadamente el Indap ha intervenido con su Programa de Suelos Degradados y ha tenido un gran impacto. Es de esperar que continúe”, agregó.
Planteles porcinos
El alcalde de Bulnes, Rodrigo de la Puente, señaló que afortunadamente en Bulnes los privados a cargo de los planteles porcinos que rodean la ciudad determinaron tomar medidas para evitar olores indeseables: “Hace tiempo que no tenemos olores y no hay denuncias ni quejas de la comunidad ni del Concejo en este tema. Antes no se podía vivir”.
Señaló que para aumentar la calidad del aire en la ciudad se plantarán mil árboles nativos en convenio con Conaf y otros dos mil por cuenta del municipio.
Chillán Viejo y Bulnes concentran planteles porcinos, cuyas emanaciones afectan calidad de vida de vecinos.
José Luis Montes V.
Uno de los “dolores del crecimiento” en Chile son los problemas medioambientales. Y aunque sería objeto de un análisis más largo relacionar si en la zona los dramas que se viven en este aspecto son efecto del progreso y desarrollo, Ñuble no está exento de problemas ambientales, partiendo por la calidad del aire en la intercomuna Chillán-Chillán Viejo, (ver página 4).
Al problema de la polución del aire, le siguen en importancia la erosión que se vive en la zona del secano interior; la concentración de vertederos en la zona de Chillán Viejo, y las altas poblaciones de cerdos que se dan en esta última comuna y también en Bulnes, con episodios de malos olores según los vientos reinantes, en los sectores vecinos.
“Triángulo de las Bermudas”
La comunidad que vive la presión más fuerte en el tema medioambiental es Chillán Viejo. Su alcalde, Felipe Aylwin, estima que las autoridades se están ensañando con esta comuna y que debiera compartirse la carga con otras localidades.
“Tenemos un relleno sanitario operando, dos vertederos abandonados percolando, (que son los de Enasa y Esparco), lodos, por así decirlo, que se obtienen de la planta de tratamiento de aguas servidas, que también está en Chillán Viejo, y que se vierten en los mismos 15 kilómetros cuadrados donde están los vertederos. Ahora nos quieren instalar una cárcel” se explaya el alcalde, quien al refutarle que la cárcel es un problema social y no medioambiental, nos asegura que un complejo para 1.200 reos, si crea un problema ambiental.
“Tenemos en la comuna dos chancheras que van a aumentar de 40 mil a 120 mil su producción, que afectan con su olor a vecinos de Rucapequén, Maule, Llollinco, Quilmo, Lajuelas y la zona urbana de Chillán. A esto se suma una planta de tratamiento de algas, que en menor escala también crea problemas de malos olores”.
Para colmo de males, Aylwin afirma que su comuna aparece hasta en el trazado del cableado de HidroAysén. Pero en su opinión lo más grave es el aire, ya que a pesar de tratarse de una situación esporádica los índices de partículas superan a las alarmas máximas santiaguinas.
Erosión
Para las comunas del secano interior de Ñuble, el mayor impacto se produce debido a la erosión, proceso en que se está perdiendo el suelo fértil por siglos de mal manejo agronómico. El presidente de la Asociación de Municipios del Valle Itata, el alcalde de Quillón, Jaime Catalán, señala que efectivamente es el principal efecto medioambiental en esa zona.
“El problema de la degradación de tierras es grave, basta recorrer la zona y observar las carcavas, que son producto de un mal manejo por décadas. Afortunadamente el Indap ha intervenido con su Programa de Suelos Degradados y ha tenido un gran impacto. Es de esperar que continúe”, agregó.
Planteles porcinos
El alcalde de Bulnes, Rodrigo de la Puente, señaló que afortunadamente en Bulnes los privados a cargo de los planteles porcinos que rodean la ciudad determinaron tomar medidas para evitar olores indeseables: “Hace tiempo que no tenemos olores y no hay denuncias ni quejas de la comunidad ni del Concejo en este tema. Antes no se podía vivir”.
Señaló que para aumentar la calidad del aire en la ciudad se plantarán mil árboles nativos en convenio con Conaf y otros dos mil por cuenta del municipio.
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